En una jornada tensa y repleta de giros políticos, las comisiones unidas de Hacienda y Justicia del Congreso de la Ciudad de México (CDMX) lograron finalmente abordar el fondo del debate sobre el dictamen de reforma a la Ley de Amparo. Sin embargo, el ritmo del debate se vio obstaculizado por las constantes interrupciones y solicitudes de suspensión emitidas por los diputados del PAN y el PRI.

La mañana comenzó con un retraso significativo, luego de que los diputados opositores pidieran suspender la sesión y cambiar el orden del día de las comisiones. A pesar de que se les concedió un plazo de más de una hora y media para hacerlo, finalmente decidieron proseguir con el debate.

Sin embargo, justo cuando parecía que el debate podría avanzar, los diputados del PAN volvieron a solicitar la suspensión. Esta vez, pidieron que todas las versiones de los ponentes que participaron en las audiencias públicas celebradas durante tres días se entreguen al pleno del Congreso. Argumentaron que esta medida era necesaria para garantizar la transparencia y el debido proceso en el análisis del dictamen.

La petición del PAN generó un ambiente tenso entre los diputados, muchos de los cuales se opusieron a la idea de suspender nuevamente el debate. Los diputados del Morena y el PT respaldaron la posición del PAN, mientras que los representantes del Juntos Haremos Historia (JHH) se mostraron más cautos, expresando su deseo de analizar las propuestas presentadas en las audiencias públicas antes de tomar una decisión.

A pesar de las tensiones políticas, el debate logró avanzar gradualmente. Los diputados del Morena y el PT presentaron sus argumentos a favor y en contra del dictamen de reforma a la Ley de Amparo, mientras que los representantes del JHH se centraron en la necesidad de garantizar la protección de los derechos humanos en el país.

A medida que el debate progresaba, las discusiones se centraban en torno a temas como la garantía de la justicia y la protección de los derechos fundamentales. Los diputados también abordaron cuestiones relativas al papel del Estado en la protección de los ciudadanos y la necesidad de fortalecer la institucionalidad para lograr una mayor justicia social.

Aunque el debate fue tensio, muchos de los participantes expresaron su compromiso con la búsqueda de soluciones que beneficien a la sociedad. En un momento dado, uno de los diputados del Morena se refirió al debate como “un ejemplo de la capacidad del sistema político para abordar conflictos y encontrar soluciones”.

A pesar de las dificultades para avanzar en el debate, las comisiones unidas lograron finalmente abordar el fondo de la discusión. Queda por verse si su trabajo será suficiente para superar los obstáculos políticos y llevar a cabo una reforma efectiva a la Ley de Amparo.